En estos días, el Taller de Proyecto Arquitectónico a cargo del Arq. Barrale, se encamina a la concreción de distintos trabajos prácticos de proyecto y construcción.
En efecto, durante el mes de noviembre se realizarán conjuntamente con los estudiantes, ejecución de distintos “dispositivos espaciales” de acotado tamaño y presupuesto.
Los usos a los que se destinan estos pequeños equipamientos, son siempre públicos y comunitarios, enmarcándose en los formatos previstos por el Ministerio de Educación a nivel Nacional, o el correspondiente al Area de Extensión de la UNR.
Está demás resaltar que los beneficios de estos trabajos prácticos son diversos:
1. el fortalecimiento de la relación docente-alumno
2. las prácticas técnico - constructivas introductorias en la formación de los estudiantes, y la articulación entre actividad académica, extensión e investigación,
3. incorporación efectiva de las condicionantes paisajísticas, sociales y culturales del entorno, etc., es decir los materiales disponibles en el sentido amplio, y su manipulación “in situ”.
4. es destacable, por otro lado, al poner un compromiso conjunto y “horizontal” en la comunidad de una cátedra, ya que participan todos los docentes, los adscriptos y todos los alumnos, en desafíos concretos y con evaluaciones parciales y finales.
5. la valoración que provee, por parte de la comunidad involucrada, ya sea una ongs, organizaciones de vecinos, etc, hacia la misma universidad.
6. permite que los integrantes de la cátedra, mejoren el alcance de sus actividades curriculares, tal como lo establecen los nuevos standards para la docencia universitaria a nivel nacional.
En proyecto 3, se construirá por cuarto año consecutivo, un espacio de usos múltiples, adecuado a las inundaciones y a cielo abierto, en madera, en el Centro Cultural Isla del Charigué. Esta experiencia se articula, en forma experimental, con lo que en el futuro será la materia optativa Taller del Obrar.
En efecto, durante el mes de noviembre se realizarán conjuntamente con los estudiantes, ejecución de distintos “dispositivos espaciales” de acotado tamaño y presupuesto.
Los usos a los que se destinan estos pequeños equipamientos, son siempre públicos y comunitarios, enmarcándose en los formatos previstos por el Ministerio de Educación a nivel Nacional, o el correspondiente al Area de Extensión de la UNR.
Está demás resaltar que los beneficios de estos trabajos prácticos son diversos:
1. el fortalecimiento de la relación docente-alumno
2. las prácticas técnico - constructivas introductorias en la formación de los estudiantes, y la articulación entre actividad académica, extensión e investigación,
3. incorporación efectiva de las condicionantes paisajísticas, sociales y culturales del entorno, etc., es decir los materiales disponibles en el sentido amplio, y su manipulación “in situ”.
4. es destacable, por otro lado, al poner un compromiso conjunto y “horizontal” en la comunidad de una cátedra, ya que participan todos los docentes, los adscriptos y todos los alumnos, en desafíos concretos y con evaluaciones parciales y finales.
5. la valoración que provee, por parte de la comunidad involucrada, ya sea una ongs, organizaciones de vecinos, etc, hacia la misma universidad.
6. permite que los integrantes de la cátedra, mejoren el alcance de sus actividades curriculares, tal como lo establecen los nuevos standards para la docencia universitaria a nivel nacional.
En proyecto 3, se construirá por cuarto año consecutivo, un espacio de usos múltiples, adecuado a las inundaciones y a cielo abierto, en madera, en el Centro Cultural Isla del Charigué. Esta experiencia se articula, en forma experimental, con lo que en el futuro será la materia optativa Taller del Obrar.
En proyecto 2, se construirá por segunda vez, una ampliación en el Centro Cultural de la comunidad Toba del barrio los Pumitas, también en Empalme Graneros. Se incluye esta experiencia como antecedente en otra asignatura optativa, denominada Taller de Espacialidades Alternativas, actualmente en elaboración.
En proyecto 1, se completará y mejorará el espacio realizado en principio con probetas, en el estacionamiento sur de nuestra Facultad, destinado a usos de expansión de docentes y estudiantes de nuestra institución.
En este sentido, también se ha concretado recientemente en la Plaza Pocho Leprati, de Barrio Ludueña, un reloj de sol comunitario, dentro del Area de DDHH.
Con motivo de que muchas actividades preparatorias se realizan en nuestro edificio, se han elegido días y horarios, que no afecten el desempeño habitual de la Facultad.
